“Son alimentos que el código alimentario argentino los define como bebidas lácteas, alimento a base de leche no existe, no reemplaza la leche, es un complemento. Está elaborada a base de leche, es el 51 por ciento, el otro 49 es agua con suero lácteo, lo que se obtiene como subproducto de la elaboración de queso. Tiene una calidad nutritiva inferior.
Si se elaboran con normas de higiene, buenas prácticas, estos alimentos no son peligrosos, no hay peligro microbiológico, el problema es que tienen una calidad nutritiva inferior que la leche.
Para niños, lo ideal sería que puedan tomar leche. Estos productos suelen estar un 50 por ciento más baratos, el tema son los nutrientes, tienen la mitad. No es lo mismo que la leche en polvo, eso es leche que se deshidrata”
“Estamos rodeados de este tipo de alimentos, no solamente en lácteos, también con los jugos, en los rótulos está toda la información que tenemos que saber como consumidores, pasa con los jamones, en un montón de alimentos. El sachet no puede decir leche, el código define la letra, los colores de los rótulos”
“Son alimentos que existen hace muchos años en el mercado pero se ve más en época de crisis porque son mucho más económicos. La organización mundial de la salud recomienda diferentes cantidades según cada nutriente, en el calcio son 1300 miligramos por día”